domingo, 21 de agosto de 2011

Consejos de Belleza

Hoy en día las mujeres invertimos mucho dinero en centros de belleza; nos preocupamos  por tener una piel suave; hacemos tratamientos para prevenir las arrugas o  atenuarlas; tratamientos para el cuidado del cabello; se invierte  dinero  en  collares, chalinas, carteras, etc. También invertimos tiempo en ejercicio físico en  pro de una buena salud y de vernos mejor. En fin todas queremos  ser bellas, estar en forma, tener un aspecto agradable y vernos bien . Estos  temas  parecen ser  temas exclusivos  del siglo XXI;  pero si miramos la Biblia en la carta de 1 de Pedro 3:3-4 notaremos que en la antigüedad también había preocupación por lo exterior, por lo que cada persona mostraba.
Las mujeres se adornaban con perlas, joyas de oro, plata y bronce; vestidos lujosos, peinados ostentosos. Los hombres  de todas las clases sociales exhibían sortijas, anillos de sellos,  cadenas de oro  la cual indicaba la dignidad del personaje, que era de alto rango.
La Biblia nos dice que: “la belleza de ustedes no sea la externa” que consiste en adornos, peinados, joyas, vestidos lujosos…sino la que procede de lo intimo del corazón, y consiste en “un espíritu suave y apacible”. Ésta si tiene valor delante de Dios.
Lo que el apóstol Pedro nos quiere hacer ver , es que las mujeres debemos invertir tiempo y dinero en adornar, pulir, masajear,  y trabajar los músculos de nuestro ser interior. Para ser adornadas con un espíritu suave, apacible, adornadas con buenas obras como mujeres que sirven a Dios. Debemos ser atractivas según  el modelo de Dios y no según el modelo del mundo. Transmitir un mensaje de cambio del  ser interior.
La mujer es la obra maestra de Dios, El nos dio belleza ,¡ nos hizo bellas! .Como dice el salmista : “tu fuiste quien formo todo mi cuerpo…te alabo porque estoy maravillado, porque es maravilloso lo que has hecho. ¡de ello estoy bien convencido! “;  no nos adornemos solo con joyas, ropas y cosméticos, sino con  el carácter de una vida decorosa, con el testimonio fruto de nuestra fidelidad a Dios y con la  integridad  producto de un corazón honesto. ¡Esto sí tiene mucho valor delante de Dios!  


lunes, 15 de agosto de 2011

Un consejo acertado

Jesús estaba en Caná de Galilea y fue invitado a una boda, donde concurre con sus discípulos.
El seguramente estaba disfrutando ese momento de alegría . Posiblemente se habría reencontrado con sus  vecinos, con amigos de la infancia; entre  los invitados también estaba su mamá María.
Seguramente ella lo miraba desde lejos y guardaba en su corazon las palabras del ángel Gabriel cuando
le dijo: "El será grande y se llamará hijo del Altísimo".
Posiblemente María estaba ansiosa para que el ministerio de Jesús comenzara a ser público.
En este relato de las bodas de Caná , da la impresión que María quisiera ayudarlo a Jesús y  se le acerca a la mesa  y le dice: "El vino se acabó", confiando en  que Jesús tenia la solución a éste problema; pero él  le responde: "Mujer no ha llegado mi hora", como diciéndole, no seas inoportuna.
María creía en la misión que su hijo vino a hacer  a este mundo; ella tenía muy claro que El era una obra del
Espíritu Santo y a  pesar de la respuesta de su hijo ella le da un consejo a la servidumbre y les dice : "Hagan lo que El les ordene".
Qué fe la de esta mujer!!! ; creo que su corazón estaba  espectante por mostrarle al mundo lo que le fue anunciado años atras;  lo que ella había criado y educado.
Que consejo mas sabio el de Maria: " Hagan lo que El os diga"; para que el milagro se lleve a cabo había que hacer lo que Jesús decía.
¡ Qué sencillo! ¡ Qué fácil!!! sólo había que obedecer para ver el milagro.
¿ Estas buscando algo extraordinario que Jesús haga en tu vida? pensá   en el consejo de María: Hacé solo lo que El te esta pidiendo.
                                                            NiKa

Una Mirada diferente

Despues del milagro de la alimentacion de las cinco mil personas, los discipulos de Jesus entraron a la barca y se dirigieron boga adentro.
Ubicándonos en el relato podríamos pensar que ellos  comentaban  lo que su Maestro habia hecho unos minutos antes, el milagro de los cinco panes y dos peces. Estarian emocionados , quiza impactados con las cosas que su Maestro hacía.
Retirados de la escena mílagrosa, comienzan a navegar,  y se desata una tormenta, no solo una tormenta sino que el vientos les era contrario dice la Biblia. Como todo barco en altamar estaban acostumbrados a los cambios climaticos, esto era parte de la vida de cualquier pescador.
En medio de la tormenta Jesús se les aparece en el mar. Algunos discípulos no lo reconocieron; otros creyeron que era un fantasma, pero Pedro, el mas audaz de todos,  el mas atrevido del grupo le dice: " Señor si eres tú  manda que yo vaya a ti sobre las aguas".
El era un pescador experimentado, sabía que sobre las aguas no se podia caminar; que hay leyes de gravedad que hacían  imposible su pedido. El estaba pidiendo algo Sobrenatural!!!. Un Milagro!!!.Un Imposible!!!
Puso los ojos en su Maestro;  Su Mirada en Aquel que podia hacer cosas Sobrenaturales; y empezo a caminar en medio de la tormenta; en medio de las olas inmensas, del fuerte viento, y de la mirada incrédula de sus amigos.
Con sus ojos  en el Maestro, experimento lo sobrenatural, vencio las leyes naturales y paso al plano de lo divino.
Con su mirada en el Maestro vencio lo imposible.
Muchas veces vivimos mirando  lo que nos ha hecho fracasar en la vida; las malas experiencias que hemos atravesado, las tormentas vividas que nos han lastimado y comenzamos a hundirnos en el mar de nuestros problemas.
Te invito a que levantes tu mirada hacia el Dios de los Milagros, hacia el Maestro de Pedro. Una mirada de Fe, una Mirada al Señor es lo que hara la diferencia en tu vida.

                                                                                             Nika

viernes, 12 de agosto de 2011

Ana, la profetisa

Lucas en el capítulo  2 versículo 36 al 38  nos habla de una mujer  viuda,  llamada Ana ;  hija de Fanuel de la tribu de Aser.  Es el único de los cuatro evangelios que la señala.
El nombre  Ana significa  “favor o Gracia” , Lucas nos dice que estuvo casada solo 7 años y luego enviudó.
Esta mujer visitaba cada día el Templo, servía en él noche y día  y  hacía oraciones y ayunos.
Ana  era  una mujer joven,  que enviudó a una edad muy temprana, la Biblia no lo aclara, pero quizá no tenia  hijos.  En medio de esa crisis,  de ese dolor,  y de tanta soledad ella  decide   servir a Dios con fidelidad.
Es elogiable la decisión de ésta mujer; una mujer con carácter firme y  gran fortaleza, que  a pesar del sufrimiento que estaba pasando y de la circunstancia que le había tocado vivir,  no reniega de su fe. Al contrario se fortalece aun más en su Dios.
Dedica sus días al servicio en el templo,  a la oración y al ayuno.
Un ejemplo  digno de imitar;  a veces  pienso, cómo haría para vivir en esa época una mujer sola, sin esposo o hijo varones que la sostengan; sin la pensión que el marido le pudiera haber dejado, sin la asistencia social del Estado. La de ella era una situación social  un poco incomoda para la época. Pero a pesar de todo priorizo  su vida espiritual.
La Biblia no lo aclara pero tal vez  la Iglesia se hacía  cargo de ella como enseñaba el apóstol Pablo en 1 Timoteo  capítulo 5. No lo sabemos .
Meditando un poco en esta historia que escribe Lucas tan significativa para nuestros días  podríamos sacar por lo menos  dos enseñanzas muy importantes para nosotras. 
1)      Ana elige una vida de piedad. A pesar de su dolor y soledad  se sobrepone a esa  circunstancia  difícil . Tomó una decisión muy importante en su vida que fue servir en el Templo todos los días. 
2)      Dios  premió su eleccion. A sus  84 años pudo ver en el  Templo al niño Jesús cuando fue presentado  por sus padres. No sólo sus ojos envejecidos lo vieron sino que ella profetizó que ese niño era el Mesías.

Como su nombre lo indica ella halló “favor” o “gracia” ante los ojos de Dios y reveló al mundo la Esperanza de Israel.
Dios le permitió ver a una edad muy avanzada, lo que ella por tantos años estuvo esperando “El Salvador”.
Dios le revela a una mujer que el niño Prometido  estaba ante sus ojos. Una bendición esperada por muchos; pero Dios se la concede a esta mujer piadosa.
Si tú estás pasando por una edad avanzada, mírate en Ana; una mujer dedicada al ministerio de la profecía, útil para el servicio en el templo y  a los demás.
Dios también tiene un plan para vos a pesar de tus  años; si sos fiel al Señor  y le dedicas tiempo a la oración y al ayuno  podrás ver como Ana, a pesar de tus ojos envejecidos la salvación para tus hijos, tus nietos, tu familia. Revelación de cosas futuras y una vida de ejemplo para generaciones venideras.
Te invito,  a vos que estas en una edad avanzada,  a que imites a esta mujer que fue favorecida por Dios.

                                                    NiKa

La petición de Ana

Ana era una mujer  IGUAL QUE NOSOTRAS. Estaba casada con Elcana  Pero tenía una pena muy grande en su corazón: era estéril , no podía tener descendencia.  Su marido cuando la veía llorar  trataba de consolarla “  ¿acaso no te  soy yo mejor que diez hijos? 1 Samuel 1:8 .
Cada año ella subía a la casa de Jehová  al monte de Silo y allí  derramaba  su alma delante de su Dios, rogándole  para que éste le  concediera un hijo.
La tristeza y la desesperación la acercaban cada día más a su  Señor. Le rogaba le concediera el derecho a ser madre. Que Dios se acordara de ella  y le  sacara esa afrenta  de su vida : “ Señor Todopoderoso, si te dignas mirar la desdicha de esta sierva tuya y , si en vez de olvidarme,  te acuerdas de mi y me concedes un hijo varón”…..
Que importante  la actitud de Ana, en vez de tener autocompasión ella oraba a su Dios porque sabía que en la oración estaba la respuesta a su petición. En la oración estaba la victoria para su vida.
Y Dios le concedió el deseo de su corazón y nació su primer  niño, a quien le puso por nombre  Samuel ,  pues dijo: al Señor se lo pedí”.
Después de Samuel, el Señor bendijo a Ana y  concibió tres hijos y dos hijas.1 Samuel 2: 21
Samuel nació como testimonio del poder de  Dios; y como respuesta a  la oración persistente de una madre:  “Este es el  niño  que yo le pedí al Señor, y él me lo concedió” l: 27 . Ana le prometió a Dios dedicarle su hijo para su  servicio  y así fue que  el niño creció  en la presencia del Señor junto al sumo sacerdote  Elí . Después de Moisés no hubo otro profeta mayor que Samuel . También fue Juez en Israel . Tuvo el honor de ungir como  Rey  a  Saúl y al Rey David.  Se dijo de él: ninguna de sus palabras cayeron en tierra.
Parte del éxito del ministerio de Samuel  se debe a la oración de su madre, a la fe que ella había depositado en su Dios y a la certeza que Dios movería su mano.
Después de esta hermosa historia bíblica no cabe más que preguntarme: ¿estoy orando por mis hijos?...¿Soy constante en mi oración por ellos? .......¿Será mi oración la que marque el destino eterno de ellos?  ¿Seré parte del éxito que puedan tener en esta vida?.
Al igual  que  Ana que Dios  ME CONCEDA  lo que estoy pidiendo.
Por ellos  estoy orando…..Ellos son mi “Pedido  a   DIOS  de cada día.
¿Qué estas pidiendo, que tu SEÑOR  haga a favor de tus hijos?


Nació el Amor

La Biblia nos habla que en Belén de Judea  nació un niño, trayendo a éste mundo un mensaje de Amor , Fe  y Esperanza.
Un mensaje que el Padre quería revelar a toda la humanidad a través de su Hijo amado.
En el pesebre  nació el evangelio, allí nacieron las buenas noticias. Dios amó al mundo y lo estaba expresando en la forma de un Niño en Belén.
El nacimiento de éste niño no sólo dividio la historia de la humanidad; sino que también divide la historia de cada cristiano  en un antes y un después  de Cristo.
En el pesebre nació  el Amor, la Fe,  y la Esperanza de la humanidad….¡ En el pesebre nació Emanuel!....
El Amor encarnado en el niño Jesús nace en una humilde  aldea de Judea, lejos de la Gloria del Padre.  Vino a experimentar la sed humana, a sufrir el cansancio, a vivir la soledad y a soportar la incomprensión. Pero traía en sus  manos un mensaje diferente al  de todo ser humano: un mensaje de Amor de Fe y de Esperanza.
Las escrituras lo muestran amando al necesitado, sanando al enfermo, libertando al oprimido, haciendo milagros frente a las multitudes y hablando en la soledad junto a Nicodemo. Amó profundamente. La expresión máxima de su  amor la mostró  en la Cruz  cuando derramó su vida por sus amigos y por sus enemigos.
El niño de Belén trajo un mensaje de Fe. Había que creer en El para ser salvo. Su mensaje de fe era para toda la humanidad . El era la fe que necesitaban los descreídos;  la seguridad para los inseguros; la confianza para los desconfiados.
En Belén nacía la fe que se necesitaba para llegar a Dios.
En el pesebre nació la Esperanza. No una esperanza barata o ligera que depende de las circunstancias de la vida, o que  confía en la fuerza del hombre, sino  una esperanza que hace que nos enfrentemos a cualquier cosa,  aún a la misma muerte, sabiendo que  tendremos  la  victoria.
El mensaje que Jesús nos dejó al nacer, es el mismo mensaje que debemos transmitir como cristianos, a los que están necesitados.
1ra Tesalonicenses 1:3 dice “ Acordándonos sin cesar…de la obra de vuestra fe, el trabajo de vuestro amor y de vuestra constancia en la esperanza en nuestro Señor Jesucristo”.
La vida cristiana debe tener las mismas características que el pesebre , debe  ser modesta  y ocuparse en hacer el bien a los demás y trabajar eficientemente en ello.
Te invito a que te  inspires en el niño de Belén,  que tengas obras que fluyan de tu fe, trabajo que fluya de tu amor y una perseverancia que  nace de una esperanza viva.

Simón de Cirene

 ¡Eh tú!, ayúdale a llevar la cruz.


Simón estaba de camino a su casa; regresaba  del campo después  de realizar sus tareas habituales, cansado por el trajín del día,  volvía con el paso lento y la respiración  pausada.
 ¡Que día agotador había sido aquel día!  Era uno de esos momentos que queremos regresar  pronto a casa, cobijarnos en el mullido calor de nuestro hogar y no salir hasta que el cuerpo vuelva a tomar fuerza... Ya estaba muy oscuro.
Pero algo estaba aconteciendo, Simón escuchaba el murmullo de la gente, él sabia que estaban preparando  la fiesta de La Pascua de los Judíos; estaban en las vísperas, él  lo sabia bien porque pertenecía a la sinagoga de los cireneos...
Pero algo extraño estaba ocurriendo  podía percibirlo en su corazón., también podía sentir en su espíritu  que ése no era un día cualquiera. Como hombre sensible  podía apreciar  que algo estaba por acontecer; su  corazón estaba expectante, sus fibras íntimas podían percibir  algo extraordinario,  algo trascendente estaba por ocurrir.
Siguió caminado hacia la plaza cuando escucho una voz que le decía: “¡Eh tu!... ayúdale a llevar la cruz hasta el Gólgota.
Ayudarle a llevar la cruz; ¿a quién?  La mente de Simón  se turbó al ver a aquél hombre sangrando, con una corona de espinas sobre su cabeza; nunca había visto algo así.
Simón pensaba ¿yo por qué tengo que ayudarlo? ;¿Acaso no hay otro? hoy fue un día terrible para mí; el sol en el campo me pegó fuerte, estoy cansado , voy rumbo a mi hogar, quería bañarme; quiero encontrarme con mi esposa y mis dos hijos.  Los pensamientos de Simón  corrían ligero dentro de su cabeza hasta que se interrumpieron cuando Jesús cae con la cruz delante de él.
El Hijo de Dios debilitado, con pocas fuerzas por los azotes recibidos no podía continuar solo cargando  su cruz , su cuerpo  estaba  herido, su  cabeza sangrando, su espíritu  atenuado  por la soledad  y el abandono de los suyos.
De pronto una mano golpea el hombro de Simón: ¡Eh tu! No te dije que le ayudes a llevar su cruz!... Simón con ese corazón que sólo los que aman a Dios tienen,  se agacha, Toma  la cruz de Jesús  llena de sangre, y dice: por amor a éste pobre, por amor a lo que está sufriendo y lo que le están haciendo padecer,  recojo su cruz ; así  comenzó a caminar al lado del Maestro hacia  el  Gólgota.
La mirada amiga y el amor profundo en los ojos de Jesús habrán quedado por siempre grabados en la memoria de Simón. Una mirada de agradecimiento y de compasión  que jamás olvidaría!
Una mirada que borraría  todo juicio! Que le haría mejor persona,  una mirada que lo llenaría de fe, que transformaría su alma.
No sabemos lo que la gente les diría durante el camino al Gólgota, pero Simón lo acompaño hasta el final. 
Seguramente  Jesús le agradecería al Padre por aliviarle la carga y enviarle a Simón el escogido para esa ocasión.
La vida de Simón continuó su curso, su encuentro con Jesús de Nazareth lo había transformado,  había transformado su hogar.
Su esposa y sus  dos hijos, Alejandro y  Rufo siguieron junto con él al Cristo resucitado; trabajando para que otros puedan conocerle.
La vida de todo ser humano no es la misma después que Jesucristo la ha visitado.
Dale un lugar en tu corazón al  Nazareno y verás tu vida y la de tu familia transformada.

                                                                                      Monica
                                              



jueves, 11 de agosto de 2011

Mujeres que sirven

Jesús siempre tuvo gran consideración hacia las mujeres. Vemos que a lo largo de su ministerio muchas de ellas   le seguían y le  servían.
A pesar de la época Jesús tenía amigas mujeres, tal como lo vemos con María y Marta. El las  visitaba en Betania, una pequeña aldea de Jerusalén. En Lucas 10: 38-42 leemos la historia de estas dos hermanas y a traves de ella  sacar una enseñanza importantísima para nuestras vidas:   Marta la mujer practica y Maria la Mujer espiritual.
Ambas son reveladoras del carácter individual que debe tener cada creyente, la devoción personal  mezclada  con los deberes prácticos. Una enseñanza que quedará a través de los tiempos y  por dos amigas  de Jesús.
En Lucas 8: 1-3 vemos Mujeres que  son nombradas solo en éste libro, con poca trascendencia y que apoyaban a  Jesús en su ministerios:  Juana,  la mujer de Herodes  y Susana,  ellas le servían con sus bienes. Lo sostenian  económicamente a Jesús.
Vemos a la mujer de Lucas 7: 37-50  .Jesús estando en la casa de Simón el fariseo, se le acerca una mujer pecadora con un frasco de alabastro con perfume; ella  lloraba sobre sus pies , los besaba y los ungía . Sabiendo Jesús la reputación de esta mujer, la pone como ejemplo de que alguien que reconoce su pecado, puede ver la misericordia de Dios y amarlo con todo su corazon.
Aun en el  momento más difícil del ministerio de Jesús, que fue  el momento de la crucifixión, las mujeres no lo abandonaron.
En el Monte Calvario, según nos relata  Mateo  27:55-56 dice que  muchas mujeres que habían seguido a Jesús estaban mirando los episodios de lejos. Y luego algunas se sentaron  delante del sepulcro. Mujeres Valientes!!!  Seguidoras de Jesús!!!! . Entre ellas estaba Maria Magdalena, Maria  la madre de Jacobo, la madre de los hijos de Zebedeo,
Jesús premia la fidelidad y la valentía de ellas; cuando El resucita se les aparece primero a las mujeres  y tuvieron  ellas  el honor en ser las primeras en proclamarlo ¡¡¡ RESUCITADO!!!!  Mateo 28: 9-10.
MUJER con su dulce voz El te esta llamando, quiere que le sirvas tal cual  lo hicieron estas mujeres en la antigüedad. El quiere usarte para extender su Reino. Para que levantes al caído, busques al perdido, atiendas al enfermo  y hagas obras de amor que engrandeceran tu espiritu y tu alma-